Muchas de las inversiones y proyectos que se ejecutan a nuestro alrededor están financiados o cofinanciados por fondos de cohesión de la Unión Europea.
Y es que estos fondos se pueden solicitar directamente a la UE, pero en su mayor parte se gestionan de forma directa por Gobiernos nacionales y, en España, por las Comunidades Autónomas.